Tú llevas tu frecuencia. Los
girasoles quieren irse al monte pero los encierran en jarrones que sirven para
los escaparates de las floristerías. ¿Por qué al monte? ¿Por qué tú y no otra?
¿Por qué no? Tal vez en la cima hallemos la respuesta. A lo mejor simplemente
comprando un girasol poniéndolo en el alfeizar de la ventana y quedarse observándolo
veinticuatro horas fuese suficiente. El equipo con camiseta amarilla dicen por
la radio que ha ganado el partido con un triple en el último segundo. Hay un
túnel que nadie más que yo puede verlo. Lo cruza una vía de tren abandonada.
Tiene un principio y final. ¿Si lo atravieso entraré en tu misma sintonía?
Quizás si encuentro girasoles dentro del túnel, no me hagan olvidar que hay una
luz que siempre hace de guía para continuar el camino. Una vez vi de pequeño
una bicicleta amarilla que creía que te podía hacer volar lo más cerca posible
del sol sin quemarse.
Saludos y gracias
No hay comentarios:
Publicar un comentario