Se lía suavemente entre sus
dedos un pitillo, lo moja lentamente, y con una mueca lo acerca al mechero y le
da la primera calada, para instantes más tarde pedirse el mismo Gin Tonic de
siempre, un cómo van las cosas al barman, un tirando para adelante, y una noche
más que se adereza con los mismos ingredientes.
Apaga la colilla contra el
suelo, se hace tarde, la pisa fuerte, no se atreve a levantar la mirada, hace
tiempo que el contrabajo dejo de sonar tan bien como al principio, es hora de
lo que más se temía, sabe que luego vendrá la ausencia, pero no puede negar que
no ve sus tobillos como marchan, se alejan de donde él está, nunca supo poner
palabras a las despedidas.
Se enciende un cigarro, se
acopla el sombrero, y le dice este es mi trabajo y no te va a gustar nada, ahora
vas a conocer mi dicha, la que me acerca a mis mayores pecados, pero jamás supe
ganarme la vida de otra manera, y a quemarropa apuesta todo lo que le queda,
las cartas una vez más no le acompañan...
Recuerda como trepaba sus
nalgas con mordiscos pequeños, como le dibujaba lienzos por su espalda desnuda,
como recogía su mechón de pelo cuando se adueñaba de su cuello, como le observaba
a los ojos a cámara lenta, como humedecía sus labios contra su pecho, y como
encendían el cigarro del después, que tan bien le sentía.
Mira al camaleón mutarse,
cambiar de estado, acoplarse a las circunstancias, corregir sus errores, definir
el nuevo trazo, y se pregunta mientras da una calada tras otra, si podrán
volar, si serán capaces cuando quieran huir de las cosas de esa manera, y apaga
el cigarro lanzando círculos de humo al tiempo.
Saludos y gracias
Siempre me gustó el juego de pensar en tercera persona, incluso de adivinar profesiones, gustos y desmanes pero siempre pierdo.
ResponderEliminarUn saludo.
Pero piensa que en el momento que te lo estás imaginando, en ese instante, nadie te puede decir lo contrario, ahí estás ganando.
EliminarUn saludo
Intrigante .....
ResponderEliminarCasi, casi, tan lejano como un pequeño simulacro del comienzo de una novela negra.
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