Un café a rayas, mientras
observamos como los muelles vuelven a inundarse y aprenden a respirar bajo el
agua, un cigarrillo, no gracias, una vez más lo estoy dejando, si ves ahí a lo
lejos, verás que el horizonte está cambiando de colores, no se me ocurre nada
mejor que si me tengo que acordar de alguien sea de ti, si supiera cómo hacerlo
te mandaría un mensaje y cuando la ciudad se volviera oscura, demasiado pronto,
quedaríamos a tomar un café a rayas, rompiendo así la tristeza de los domingos
llenos de reseca, te diría, sé que ahora no lo puedes ver, pero estoy seguro de
algo, no me preguntes como, pero ahí delante hay un horizonte que está
cambiando de colores, quizás esté más cerca el día que se despierte lleno de
promesas, y comiencen a hacerse realidad, y aunque todavía estemos esperando
los mensajes de los pájaros, no estaría nada mal que estuvieras a mi lado para
tomar esa mañana un café a rayas.
Saludos y gracias
"no estaría nada mal..." buena entrada, saludos
ResponderEliminarGracias por comentar:) Saludos
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