MUÑECOS DE NIEVE EN PRIMAVERA

Invasión, cometas en el cielo, la tinta de los periódicos desaparece, y tú quieres gritar revolución, la guerra eterna, desatar la jauría de hambrientos que estarán a nuestro lado, hacer ciclones con molinillos de viento comenzar a hacer caer sus bloques de pánico, sus lujos, sus personajes borbónicos, desmontar las reglas de su maldito juego, y cambiar de tablero, después tararear, tararear la invasión, tararear su hundimiento, tararear nuestra revolución, espejos transparentes en el cielo y al fin que nos guste lo que vemos reflejado allí arriba, hacer caer molinos de viento como si se tratasen de gigantes, te diré, no lo sé, no sé si estamos equivocados o no, o entramos en modo paranoia permanente y hace falta explosión, invasión para salir de él, mientras entro en el salón, los dos lo sabemos al unísono la revolución e invasión más allá de la mente es difícil y complicado, lo que sí que tendré siempre para ti aunque sea primavera serán todos los muñecos de nieve que quieras, como el mismo que te enseño entre mis manos fumando la pipa de nuestra oportunidad y crear de una vez por todas invasión y revolución.

Saludos y gracias