QUE ME QUEDA DESPUÉS DEL FIN DE SEMANA

Me queda el olor de tu cuerpo, el sabor de tus labios, tu sonrisa cómplice, y saber que te llevas un buen recuerdo.

Me queda saber que aun puedo batir a antiguos demonios, que volverán, pero que una vez más estaré ahí dispuesto al enfrentamiento.

Me queda una larga espera, saber que no será nada fácil y que esperemos que con viejas películas y antiguos partidos de baloncesto consiga apaciguar este recorrido porque no decirlo, quizás al borde del abismo en algunos momentos.

Me queda volver a aprender a construir el futuro con los pensamientos. A creer en imposibles, a volver a alcanzar ese punto de utopía que lo hace todo mucho más fácil.

Me queda saber que una vez más fui capaz de superar algunos baches que convirtieron el camino en tortuoso e innegociable en determinados instantes. De haber alcanzado pequeñas metas. De que una vez más me di cuenta que la solución está en creer en uno mismo. En que queramos aceptarlo o no, nosotros somos los que atraemos lo que nos pasa en la vida, ya sea bueno o malo.

Me queda en el recuerdo tu última mirada, tu último beso, tus últimas palabras, breves, concisas, pero suficientes para quedarme tranquilo y reconocer en ellas la importancia de su significado.

Me queda también el recuerdo de la última noche, tú tan bella con tu falda de colegiala, la alegría de saber que empiezas a confiar en mí, gestos que dejan huella para un posible y bello futuro, ¿por qué no? Al fin y al cabo quizás el futuro no este tan lejos como muchas veces nos pensamos, y yo el primero. La paz que tengo cuando estoy junto a ti.

Me queda la memoria de tu cuerpo desnudo junto al mío.

Me queda volver a comprender lo que ya sabía, que la inestabilidad es una cuerda floja, que está bien como experiencia para algunas temporadas, pero no para siempre. Que el problema en mi caso no es la soledad, sino sentirme solo. Que necesito mi espacio físico, mi lugar, mi pequeño escondrijo en este mundo. Y compartirlo cuando yo quiera y con quien quiera. Pero en definitiva mi sitio para poder marcar mi tempo, mi ritmo.

Me quedan las ganas de volver a luchar si se tercia la ocasión, de tener la impresión que todo marchara bien si yo quiero, que seguro que nos volvemos a ver más pronto que tarde. Y lo más importante, yo con ganas de ti, y tú con ganas de mí.

Me queda la ilusión una vez más que viejos y nuevos sueños se harán realidad, incluyendo en ellos a los más ilusos.

Me queda un buen karma mientras escribo estas líneas.

Me queda lo más obvio de todo, saber que te echare mucho de menos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario