UN ASESINATO

He matado a mi otro yo
y nadie me ha declarado culpable
con mis manos, con una soga al cuello,
con la cabeza bajo el agua,
con el cuchillo de pelar patatas,
apretando el gatillo y devorando su sien.

He matado a mi otro yo
y nadie me ha felicitado
ni palmaditas en la espalda
ni regalos junto a la puerta 23
en mi contra solo he alegado
en defensa propia.

He matado a mi otro yo
ni juicios, ni juez con mazo,
ni fiscales corruptos
con trajes de Armani
y pintas de chuloputas
ni abogados piratas
con la botella de ron bajo cuestas.

He matado a mi otro yo
sin cuartada posible
sin ningún as bajo la manga
sin declararme culpable
ni tampoco inocente
ahora me siento
más libre que nunca.


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