PARÉNTESIS NUCLEAR

Por mucho que no quieras ver lo que sucede ahí fuera, apenas pase el tiempo lo anunciaran por todas partes, por todas partes, tal vez quede un lienzo libre, ojalá aún quede alguna nota por tocar, así que no lo intentes una vez más tú sola, que seas tú junto a alguien la que le intente poner sentido a los renglones torcidos que lo pusieron todo patas arriba, y quien le de cuerda al reloj para la cuenta atrás, es evidente que aletargará las posibilidades de salir corriendo, no te conformes con lo que será una vez la cuenta final llegue a cero, quizás sea entonces la hora de la inflexión infinitesimal, el momento de desear lo prohibido, siempre que tengas claro que no habrá vuelta atrás, eso es lo maravilloso, porque aunque aprieten el maldito botón para subyacer el concepto del mañana, cuando llegue el paréntesis nuclear, es preciso que vuelvas a recordar que antes de que pase nada de todo esto, a las diez tenías una cita esta mañana, él te aconsejará que recuerdes que no estás sola, porque ya aprendió a como congelar el estado de las cosas que os hacen sentir bien, ojalá te des cuenta que todo se acabo, se termino....

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