La calle amanece castaña y
porque no picar un poco de almendras para juntarlas con los cereales que más
tarde acabarán flotando en un bol azul lleno de leche y las lunas de miel tan
solo quedarán como recuerdos que ojalá hubiesen sido pero nunca serán… Ni las
madrugadas que me imaginaba que terminaba eso a lo que llaman guerras y crisis económicas
y venías no solo a desnudarme, sino a mostrarme con la suavidad de tus manos
que el paraíso y un lugar mejor no se encontraban en ir a buscar otro sitio o
mudarse de planeta ni bajar las lunas de miel, que no era tan solo un estado
mental, que era algo que tan solo nosotros podíamos sentir.
Saludos y gracias
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