Es tan grande el estallido de
soledad, el vacio enorme que deja la propia masturbación, que me acurruco en
una de las esquinas de la habitación, respirando las motas de polvo del suelo,
haciéndome cada vez más pequeño, encogiendo, siguiendo la línea trazada por el
fin de los tiempos, no hay nadie más, solo insectos que caminan en fila india y
me observan guardando una cierta distancia, el timbre no suena, el móvil se ha
quedado sin batería, el último aliento del silencio, la despedida del papel que
está a punto de prender, cenizas y mucha suciedad, quedó en el olvido eso del
como volver a empezar, el final será mucho más triste de lo que podíamos
imaginar, traición al hombre de detrás del espejo, la metamorfosis ofrece su
exposición de galería, ya soy una cucaracha, ya se me puede chafar, o resistir
a un ataque nuclear.
Saludos y gracias
No hay comentarios:
Publicar un comentario